Lavar la ropa parece una tarea fácil hasta tus pantalones vaqueros blancos salen amarillos.
Pero no sólo la ropa es susceptible a algunos errores comunes de lavado; tu ropa de cama también puede estar sufriendo estos costosos errores.
1. Lavar y secar las sábanas junto con las toallas
Aunque tú ames tus sábanas y toallas, estas no se aman entre sí. ¿La razón? Las toallas pueden producir una gran cantidad de pelusa que se adhiere a las sábanas, sobre todo en la secadora.
Así, tus hermosas sábanas blancas de repente pueden estar recubiertas por un montón de pequeñas bolitas de pelusa.
Además las toallas también pueden crear una gran cantidad de fricción, lo que reduce la vida útil de tu ropa de cama. Así que mejor lava y seca las sábanas separadas de las toallas.
2. Dejar las sábanas en la lavadora
Tender la cama cada mañana es bastante difícil, y mucho más lo es planchar sábanas arrugadas.
Además de que una colcha o sábana superior arrugada no tiene un buen aspecto.
Afortunadamente, puedes evitar las arrugas siendo un poco más atenta con tu ropa de cama mientras las lavas.Por ejemplo, el ciclo de centrifugado en la lavadora chupa el tejido de las sábanas contra la pared del lavarropas. Y si las dejas allí se formarán arrugas.
Así que todo lo que tienes que hacer es sacar las sábanas de la lavadora tan pronto como se hayan terminado de lavar y sacudirlas antes de ponerlas en la secadora.
3. Lavar con agua demasiado caliente
¿Sabías que todo el algodón encoge? Y aunque se puede estirar de nuevo, muchas veces contribuimos a ello lavando la ropa de cama en agua muy caliente y luego secándolas a altas temperaturas en la secadora.
¿La solución? Mantén la temperatura razonable y el encogimiento será mucho menos de lo que cabría esperar.
4. Usar detergentes fuertes
Un detergente fuerte es tan malo como usar demasiado detergente. Puede hacer daño a tus sábanas, sobre todo si son de buena calidad.
Ten en cuenta que, en general, las sábanas no se ensucian tanto como tus pantalones vaqueros o la ropa de entrenamiento.
Por eso, utilizar un detergente suave extenderá la vida útil de tus sábanas.
5. No lavar la colcha o edredón
Aunque quizás estás acostumbrada a lavarlos con menor frecuencia, los expertos recomiendan lavar la colcha y el edredón cada vez que lavas las sábanas.
De esta forma, cuando cambias las sábanas también puedes aprovechar a cambiar la colcha, y toda tu cama estará limpia y perfumada.
¿Cuál de estos costosos errores estabas cometiendo al lavar tu ropa de cama? ¡Cuéntanos! Y para una buena noche de sueño.