5 Habitos para conseguir bienestar.
Bienestar o felicidad son términos muy complejos y relativos que cada persona puede interpretar de una manera completamente diferente. Sin embargo, aunque el bienestar físico y emocional puede conseguirse a través de numerosas rutinas, hábitos o prácticas, y aunque cada persona tiene sus gustos y necesidades específicas, existen una serie de hábitos absolutamente necesarios, en un sentido biológico, para mantener la salud y la energía. Hábitos saludables con los que empezar a recorrer el camino del bienestar y que propician otras actitudes, cambios y revisiones de viejas costumbres que sólo nos alejan de la felicidad y el amor, del mundo y de nosotr@s mism@s.
La alimentación
Una alimentación saludable va mucho más allá de las cuestiones estéticas, de si tal cosa nos engorda o nos adelgaza. Este punto de vista resulta bastante superficial, teniendo en cuenta la enorme importancia que tiene la nutrición en todos los aspectos de nuestra vida.
Muchas veces, no nos damos cuenta de que los alimentos que consumimos son los responsables de mantenernos vivos. Que más allá de nuestras ideas o prejuicios, los nutrientes no son otra cosa que bioquímica dentro del organismo. Y para poder mantenerse vivo, fuerte y feliz, nuestro cuerpo requiere unos cuidados esenciales con respecto a la alimentación.
Nuestro consejo es que te informes, que aprendas todo lo que puedas sobre nutrición, ya que aunque no te lo parezca los alimentos que te llevas a la boca son responsables de numerosos trastornos que jamás relacionarías con la alimentación, como tu estado emocional, tu estrés o tu infelicidad.
Estos son algunos consejos básicos:
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- Infórmate, aprende sobre nutrición, implícate, elabora una dieta a tu medida, y responsabilízate; no menosprecies uno de los factores más importantes de tu vida y no antepongas otras opciones que, a la larga, no tienen tanta repercusión sobre ti, como el trabajo o las obligaciones sociales.
- Procura alimentarte de manera variada. No hay ningún alimento que sea milagroso ni proporcione salud por sí mismo. Una alimentación responsable y saludable incluye una gran variedad de alimentos.
- No elimines ningún nutriente de tu dieta: proteínas, grasas, carbohidratos, minerales y vitaminas… todos son necesarios para tu supervivencia.
- Evita, siempre que puedas, consumir comida pre-elaborada o industrial, y elige de manera regular alimentos naturales poco o nada procesados, a ser posible de origen ecológico. Aprende a comprar ecológico, es fácil y evitarás los efectos perjudiciales de la alimentación tóxica.
- No te dejes engañar por dietas milagrosas que no buscan sino los beneficios económicos de determinados productos, libros o propaganda. No hay dietas generalizadas ni milagrosas. No hay mejor manera de proporcionarte salud que implicarte con tu propio organismo, conocerlo y ofrecerle aquello que necesita. Si realmente necesitas adelgazar, consulta nuestro reportaje cómo adelgazar definitivamente y no conviertas a tu cuerpo en tu peor enemigo.
Ejercicio
Presta atención a este apartado, porque en esta sociedad de tiranía estética suele existir una gran confusión sobre lo que significa hacer ejercicio para mantener la salud.
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- Poner el corazón a mil por hora en el gimnasio para adelgazar, no es mantener la salud.
- Castigarme con horas de spinning y llevar mi cuerpo hasta el límite, no es mantener la salud.
- Hinchar mis músculos y hacerlos grandes sin ningún fundamento, no es mantener la salud.
- Escuchar música tronadora que excita mis neuronas mientras sudo como un pollo en el horno, no es mantener la salud.
- Y realizar cualquier tipo de ejercicio que me contraiga, me estrese, me hinche, me haga más rígida, me obsesione, me haga flaquear, me ponga la cara roja como un tomate, me lesione o me debilite, no es mantener la salud.
Hacer ejercicio para mantener la salud es ejercitar mi cuerpo para que se mantenga fuerte, elástico y flexible:
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- Con respeto, cuidado y moderación.
- Con constancia y responsabilidad.
- Manteniendo una respiración adecuada que no oxide mi organismo (cuando se empieza a respirar por la boca, es momento de parar).
- Haciendo trabajar al corazón lo justo y necesario.
- Favoreciendo la depuración profunda del organismo.
- Buscando el bienestar y la vitalidad, no el estrés y la competitividad.
Caminar al aire libre, realizar ejercicios de yoga, nadar en el mar, bailar o hacer travesías por la montaña sí son formas saludables de mantener el cuerpo en forma. Si tienes dudas, consulta nuestro reportaje cómo hacer ejercicio saludable.
Descanso
Descansar es mucho más importante de lo que crees. Mientras duermes por las noches, tu organismo realiza infinidad de procesos en un esfuerzo constante por mantener tu salud y tu vitalidad. Dormir en profundidad, sin estrés, con las emociones templadas y las horas suficientes es uno de los hábitos más necesarios que existen, no sólo para mantener el sistema inmunológico en plena forma, sino también para la salud emocional e intelectual.
Algunas pautas básicas para dormir bien:
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- Acostarse con la caída del sol o relativamente cerca. Es decir, dormir pronto.
- Levantarse con la salida del sol, madrugar.
- Dormir sin luz, sin tele, sin ruido, sin electricidad.
- Realizar tareas agradables y relajantes antes de ir a dormir.
- Dormir con la digestión hecha. Para ello, debemos cenar un par de horas antes de acostarnos.
Algunos trucos contra el insomnio:
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- Oler aceite esencial de lavanda o manzanilla (o poner unas gotas en la almohada)
- Tomar infusiones relajantes.
- Darse un baño o una ducha caliente.
- Hacer el amor.
- Recibir un masaje.
- Hacer yoga y meditación antes de dormir.
- Dar un paseo antes de dormir.
- Cenar ligero.
Si tienes dudas, consulta nuestro artículos sobre la importancia de dormir bien y el tratamiento natural del insomnio.
Vida sin tóxicos
No te haces una idea de hasta qué punto los elementos tóxicos que nos rodean por todas partes interfieren con nuestro bienestar, salud y felicidad.
Para lograr bienestar y una vida saludable de manera integral es necesario no sólo revisar las costumbres tóxicas, sino también todos los elementos tóxicos que nos rodean. ¿Qué áreas podrías revisar para eliminar de manera definitiva los tóxicos de tu vida?
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- Tóxicos en la alimentación.
- Tóxicos en los productos de higiene y cosmética.
- Tóxicos en los productos de limpieza del hogar.
- Tóxicos en los muebles y elementos de construcción. Evita las patologías que producen los edificios enfermos.
Sí, puede parecerte que es imposible deshacerse de todos estos ingredientes industriales altamente perjudiciales para la salud, pero no lo es, de verdad. Existen alternativas saludables, por lo que para poder vivir una vida limpia, sana y saludable es necesario informarse, comprometerse y cambiar algunas cosas. En nuestra web tienes mucha información acerca de cómo sustituir los ingredientes químicos industriales por versiones naturales en las distintas áreas de la vida. Lee, infórmate, actúa. Consume Vitamina N.
Amor
Sí, puede sonar cursi, pero en último término es el amor en sus muchas versiones lo que da sentido a nuestra vida. El amor a los demás y a mí; el amor hacia dentro y hacia afuera. ¿No crees?
Lo curioso es que aunque seguramente todas las personas coinciden en este pensamiento, lo olvidamos con demasiada frecuencia, anteponiendo casi siempre asuntos completamente intrascendentes a aquello que de verdad tiene sentido. Malgastamos nuestro tiempo, nuestras energías, nuestro talento y nuestros recursos en actividades y experiencias que no hacen más que debilitarnos, que nos alejan del amor más que acercarnos a él.
Cuando me doy cuenta de que estoy invirtiendo demasiado tiempo o esfuerzo en un trabajo poco gratificante o estresante, en gente que me debilita, en actividades que no me interesan, en conversaciones intrascendentes, en noticias que me deprimen, en libros que me aburren, en alimentos que me envenenan, procuro recordar que:
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- Con quien quiero pasar la mayor parte de mi tiempo es con aquellas personas que me hacen sentir amorosa, viva, graciosa, alegre, divertida, inteligente, cariñosa, bella y capaz.
- Quiero dedicarme a un trabajo que materialice todo mi potencial, con el que disfrute, que suponga un reto, que me convierta en alguien mejor.
- Puede que exista la reencarnación, pero también puede que no y que, por tanto, la única vida que tenga sea esta, la que vivo ahora, la que dejo correr.
- El presente se escapa rápidamente, como el agua entre las manos.
- Los pequeños gestos amorosos que tengo con cualquier persona, cualquier día, me hacen increíblemente feliz.
- Es una estupidez perder el tiempo pretendiendo cambiar las cosas que no está en mis manos cambiar.
Procurarnos bienestar y felicidad es un derecho y una obligación y, para conseguirlo, sólo hay que prestar un poco de atención a las actividades, hábitos y prácticas que realizamos cada día de manera automática. Hacerlas conscientes y cambiar las que sea necesario cambiar.