Aunque la gran mayoría externaliza la limpieza de edredones, es posible hacerlo en casa y es más sencillo de lo que se cree. Así debes hacerlo en función del tipo de ropa de cama que tengas.
Los expertos coinciden: el mejor momento para lavar la ropa doméstica, en concreto la de cama, es en primavera y verano, cuando ya hace calor y las prendas se secan mucho más rápido y al aire, sin necesidad de utilizar secadoras, con los problemas que conllevan a su vez.
Lavar el edredón en casa sólo es posible si la etiqueta así lo sugiere. Suele tratarse de la mayoría de los casos, sin embargo, por el tipo de relleno existen algunos nórdicos que el fabricante recomienda lavar en seco.
Por ello, el primer caso antes de comenzar es consultar detenidamente las instrucciones de lavado especificadas en la etiqueta.
El segundo paso, debemos verificar con atención que el edredón no tenga ningún roto o descosido en alguna parte, ya que podríamos destrozar el nórdico.
Cómo lavar un edredón en casa
Una vez hemos consultado las instrucciones de lavado del fabricante, debemos tener dos detalles en la cabeza: el tipo de detergente y el lugar de lavado.
— Si nuestro edredón está hecho de algodón, como ocurre en casi todos los casos, resulta conveniente utilizar detergentes y jabones suaves, así como evitar el uso de suavizante (no es necesario y puede llegar a estropear el edredón).
— En cuanto al tamaño, en el caso de nórdicos que no superen 120 centímetros de ancho, podemos lavarlos en la lavadora (siempre y cuando se haya comprobado previamente la capacidad del tambor). En casos de mayor tamaño, los expertos recomiendan llevar a cabo el proceso en una bañera.