Consejos para comprar edredones y almohadas
A la hora de comprar artículos de cama se recomienda, en general, buscar calidad certificada. En la fabricación se utilizan tejidos de primera calidad a prueba de plumas y materiales de relleno seleccionados (pluma y plumón). Los artículos controlados se someten a rigurosos controles en los distintos procesos de fabricación y limpieza.
Los artículos de cama con relleno de pluma y plumón identificados con la marca NOMITE® se caracterizan por el tejido especial de sus fundas, que impide la salida de las plumas y plumones, por lo que son aptos para personas alérgicas a los ácaros del polvo.
La mayor parte de los ácaros del polvo domésticos se concentra en los colchones. Las escamas de la piel y los ácaros penetran fácilmente en el tejido poroso de los colchones y, con el alérgeno de los ácaros, se agitan con los movimientos que hacemos mientras dormimos. Por eso se recomienda encarecidamente a los alérgicos a los ácaros del polvo que envuelvan el colchón completamente en una funda antiácaros. El alérgeno de los ácaros también puede existir en los muebles acolchados, alfombras, peluches y simplemente en el aire (por ejemplo, al levantar polvo al aspirar) en cantidades significativas.
Un tejido apretado que no permita la salida de plumas en los artículos de cama representa una verdadera «barrera antiácaros». Este tejido tiene una textura muy apretada, para así evitar la salida de las plumas y plumones. Los ácaros del polvo y las escamas de piel humana, que constituyen el alimento de los ácaros, no logran atravesar este tejido.
En pruebas de larga duración efectuadas en artículos de cama de pluma y plumón se constataron, lógicamente, concentraciones muy bajas de ácaros y alérgenos. Por tanto, los edredones de pluma y plumón no tienen nada que temer a la comparación con artículos de cama sintéticos: desde el punto de vista alergológico son inofensivos. Los artículos de cama con relleno de pluma y plumón no desempeñan ningún papel como hábitat ni como fuente de alimento para los ácaros del polvo.(1)
Incluso las investigaciones internacionales más recientes que, en estudios de larga duración, abordaran la cuestión de una posible relación entre los artículos de cama de pluma y plumón y la alergia al polvo refutan por unanimidad la posición habitualmente defendida de que los respectivos artículos de cama representan un riesgo elevado para personas con alergia al polvo