Saca todas tus pertenencias de su ubicación actual. Esto podría parecer doloroso y que estás creando un desorden mayor, pero si realmente quieres organizar tu habitación de nuevo, tendrás que comenzar desde el principio. Aunque podrías sentirte abrumado por la gigante pila de cosas que has creado en el piso, escritorio o cama, ten la seguridad de que encontrarás el lugar correcto para cada cosa que tienes.
- Saca todo de tu clóset: zapatos, ropa y cualquier otra cosa que guardes en este puede ir a la pila del piso, frente al clóset, de preferencia ponlo en una bolsa o caja.
- Saca todo de tu escritorio. Puedes poner los papeles y todo lo demás que encuentres sobre la superficie de tu escritorio, si hay basura, cosas rotas, inservibles, tíralas o sepáralas en una bolsa de basura, y tus cosas en otra caja/bolsa aparte.
- Saca todo de tu vestidor. Si estás generando demasiado desorden vacía un cajón a la vez.
- Saca cualquier otra cosa que esté alrededor y colócala sobre tu cama y en el piso o en la caja ordenadamente.
- Si sacar todo de su lugar al mismo tiempo es abrumador no te preocupes, sigue la regla de 3 y ordena lo que está ocupando demasiado espacio, puedes resolverlo vaciando un área como por ejemplo: tu cuarto es como un reloj, tu cama representa las 12 del reloj y tendrás que vaciar tu cuarto separando lo inservible de lo que sirve, al sentido del reloj osea, de izquierda a derecha.
- Organiza tus cosas. Antes de empezar a resolver adónde debe ir cada cosa, deberías conseguir algunas cajas y etiquetarlas para diferentes propósitos. Los contenedores o cubetas de plástico funcionarán igualmente bien, pero las cajas son mejores porque puedes tirarlas cuando termines de organizar y no tendrás que ordenar más cosas. Así deberías etiquetar las cajas:
- Conservar. Las cosas que conserves serán aquellas que usas con regularidad. Si has usado el artículo en los últimos dos o tres meses, debes conservarlo.
- Almacenar. Estas son las cosas que no puedes soportar tirar, tales como algo con valor sentimental, pero que rara vez usas. También puedes almacenar una gran porción de tu ropa que no usarás hasta la siguiente temporada, o dos. Si estás a la mitad del verano, puedes almacenar los suéteres de invierno, y si es invierno, puedes almacenar tus vestidos de verano.
- Donar o vender. Estas son las cosas que podrían beneficiar a alguien, o que se podrían vender, pero que ya no necesitas. Podrías tener un suéter precioso que ya no te queda, mismo que puedes donar, o un viejo libro de texto que puedes vender.
- Tirar. Estas son las cosas que no necesita nadie, incluyéndote. Si tienes que pasar unos momentos preguntándote qué es algo, o cuándo fue la última vez que lo viste, es tiempo de tirarlo.
- Intenta deshacerte de tantas cosas como sea posible. Este es un paso importante. Aunque podrías querer ponerlo todo en la caja de “Conservar”, o incluirlo todo en la caja de “Almacenar” esto no te ayudará a organizarte. Necesitas hacer un examen profundo para resolver qué es lo que necesitas realmente en tu vida. Recuerda que menos realmente es más; cuantas menos cosas tengas más sencillo será organizarlas.
- Prueba con la regla de veinte segundos. Si tienes que pasar más de veinte segundos mirando un artículo y preguntándote si alguna vez lo volverás a usar, entonces la respuesta es que no.
- Si tienes algo que no necesitas pero de lo que no te quieres deshacer, intenta dárselo a un amigo o miembro de la familia, así te sentirás mejor sabiendo que está en manos de otra persona.
- Pon todas las cajas, excepto la de “Conservar” en el lugar correcto. Ahora que has organizado tu habitación, puedes comenzar a librarte de todas las cosas que no necesitas. Cuanto más pronto te libres o guardes las otras cajas, más sencillo será continuar con tu organización. Esto es lo que debes hacer:
- La primera parte es fácil. Tira todo lo que está en la caja de “Tirar”.
- Encuentra una iglesia local, beneficencia, u otra organización que acepte donaciones, y lleva todas las cosas que quieres donar. Prepárate para que te digan que no aceptarán algunas de tus cosas. Puedes o intentar donarlas en otra parte o simplemente tirarlas.
- Comienza a vender tus artículos de la caja de “Vender”. Organiza una venta de garage .
- Guarda tus cajas de “Almacenar”. Si tienes una unidad de almacenado u otro lugar fuera de tu habitación para guardarlas, genial. De no ser así, acomódalas en una parte de tu recámara que no uses a menudo, como debajo de la cama o en la parte trasera del clóset. Recuerda etiquetarlas meticulosamente, para saber adónde están las cosas cuando las requieras.