Si tienes un sofá o sillas de microfibra, frota alcohol para quitar esas manchas. Lo único que necesitas es una esponja blanca y un cepillo de cerdas blanco (toma en cuenta que si utilizas cepillos o esponjas de colores, estos podrían manchar de colores tus muebles). Vierte el alcohol en una botella de spray, rocía el área que esta manchada y luego frota con la esponja. Una vez que el alcohol se seque, usa el cepillo de cerdas para suavizar nuevamente las fibras.